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Infanto-juvenil |
Durante la infancia y la adolescencia, nuestra personalidad aún no está formada, y somos más flexibles ante las influencias externas. Pero por ello, también más vulnerables.
El tratamiento psicológico a estas edades, intenta abarcar no sólo al niño o al adolescente, sino también a su familia. El intervenir en la familia, es importante para que éstos sepan como manejar la situación, en un momento en que su influencia es básica para el desarrollo personal y emocional de esta persona.
Se trata:
- Depresión : tristeza, apatía, irritabilidad, lloros frecuentes. Suelen emplear mucho la frase "estoy aburrido"
- Ansiedad: la ansiedad cursa con miedo, palpitaciones, sudores, temblores,...
- Trastorno de hiperactividad con déficit de atención (TDHA): impulsividad, disminución de la atención ("parece que no me oye"), hiperactividad (no es capaz de estar sentado), no aguanta esperar en la cola, interrumpe las conversaciones,...
- Trastornos de comportamiento: desobediencia, rabietas, irritabilidad, pega, insulta, mala relación con sus iguales,...
- Timidez o aislamiento social: retraimiento social, sumisión, problemas para relacionarse fuera de casa, pero no dentro de casa, miedo a la evaluación negativa, miedo al fracaso, sensibles al castigo.
- Pérdida de motivación ante los estudios
- Ansiedad ante los exámenes:la ansiedad es necesaria para el rendimiento cognitivo, pero si sobrepasa un nivel nos perjudica. Aunque los conocimientos sean altos, la ansiedad puede bloquear la memoria y producir un bloqueo a la hora de recuperar la información aprendida.
- Bullying: la víctima del bullying siente miedo, humillación, impotencia, disminución de la autoestima, vergüenza,... El abusador le suprime su toma de decisiones y su personalidad.
- Pesadillas y terrores nocturnos
- Enuresis y encopresis (trastornos de eliminación)
- Somatizaciones
- Trastornos alimenticios: anorexia y bulimia
- Fobias específicas: a la ocuridad, a los animales, a fenómenos naturales,...
- Adicciones a los videojuegos, a internet,...
La terapia de TDHA combinamos la terapia conductual y familiar a la terapia de movimientos rítmicos. Estos movimientos provocan la reintegración de reflejos primitivos que siguen presentes en el sujeto y que pueden interferir en su aprendizaje, y en su capacidad para estar sentados (ganglios basales).
Si tienes alguna duda, no dudes en ponerte en contacto con nosotros.
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Equilibrio de cuerpo y mente
clinicaelcastillo12@blogspot.com |
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